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1. Precios demasiado bajos: si es demasiado bueno para ser verdad… probablemente lo sea

Si encuentras un proveedor que ofrece materiales a un precio mucho más bajo que los distribuidores reconocidos, deberías desconfiar de inmediato. Los estafadores suelen atraer con precios irresistibles para enganchar compradores desprevenidos. Recuerda: el precio bajo puede ser el anzuelo perfecto para una estafa costosa.

2. Cuidado con páginas web clonadas: el camuflaje perfecto para robarte

Una práctica común entre estafadores es clonar sitios web de marcas reconocidas. Copian logos, textos, incluso colores, para hacer pasar el sitio como oficial. En estos casos, ofrecen precios muy bajos y promesas irreales. Por ejemplo, un fabricante de varilla NUNCA vende directo por internet ni publica precios en su web. Si ves lo contrario, estás ante una señal de alerta.

3. Verifica al proveedor: no todo lo que brilla es acero confiable

Revisa cuidadosamente el dominio del sitio web. En sitios oficiales, el dominio corporativo coincide con el correo electrónico y los datos de contacto. En páginas fraudulentas, esto no sucede: el dominio suele parecer genérico o no relacionado con la marca, y los teléfonos suelen ser sospechosos. Tómate el tiempo de comparar y confirmar antes de pagar un solo peso.

4. Ubicación y contacto: haz una videollamada o pide una visita

Una forma sencilla pero poderosa de confirmar la legitimidad de un proveedor es buscar su ubicación en Google Maps. Luego, llama al número de contacto y solicita una videollamada o incluso una visita a sus oficinas corporativas. Un estafador evitará cualquier forma de contacto directo o presencial.

Protege tu inversión: una mala compra puede salirte muy cara

En la industria de la construcción, no hay margen para errores cuando se trata de compras. Evita fraudes, protégete, y sigue siempre estas recomendaciones antes de confiar en un proveedor nuevo.